Si lo piensas, seguro que una de las cosas que más quebraderos de cabeza te causa en tu día a día es pensar qué comida llevar al trabajo. Tiene que ser algo que aguante, que no te deje con hambre, que sea rápido de hacer, que no te salga por un ojo de la cara, que no sea siempre lo mismo… Parece que no, pero tiene su intríngulis.
Tranquilidad porque hay solución. Es posible encontrar comidas para llevar al trabajo que sean nutritivas, económicas y fáciles de hacer.
No te conformes con una triste ensalada
Ya te estarás imaginando que te vamos a dar un montón de recetas de ensaladas, y en cierto modo es así, no te vamos a engañar, pero es que el universo ensalada es mucho más amplio de lo que imaginas.
Las comidas ligeras no tienen porqué ser pobres en nutrientes ni dejarte con hambre. Si quieres controlar la dieta, una de las peores cosas que puedes hacer es comerte una ensalada a mediodía y después pasarte la tarde picoteando.
Hay vida más allá de la lechuga con tomate
Además de verdura, un complemento perfecto para las ensaladas son las legumbres y los frutos secos, dos alimentos muy sanos que no pueden faltar en tu dieta puesto que aportan mucha fibra, vitamina B y minerales, y además los frutos secos también contienen proteína y las llamadas grasas buenas. Y lo mejor es que ya vienen hechos, así que son perfectos para las comidas rápidas.
Añade fruta a tus ensaladas. La manzana o el aguacate son ya bastante comunes, y la familia aumenta: uvas (con trozos de queso), plátano (contrasta y a la vez combina muy bien con los pepinillos), higos, fresas, kiwis…
Los alimentos crudos también se comen
Espinacas, champiñones, col lombarda en tiras, brócoli en láminas… puede que tengas la costumbre de cocinarlos pero te podemos asegurar que crudos están buenísimos.
Un término medio entre lo crudo y lo cocinado son las conservas. Una lata de sardinas te aportará Omega-3 y te ayudará a controlar el colesterol, aunque no hay que abusar.
Juega con el aliño
Al elegir ensaladas para llevar como comida al trabajo, el aliño puede ser un problema. Si lo preparamos en casa, para la hora de comer puede estar todo demasiado empapado, y si no tendremos que llevarnos todo el “kit”.
Por suerte cuentas con un montón de salsas preparadas que son perfectas para ensalada y no las apelmazan como lo hace el clásico combinado aceite-vinagre. La salsa de mostaza y miel, por ejemplo, está deliciosa y da muchísimo sabor.
Cocina con visión de futuro
Incluso cuando no dispongas de microondas y se trate de comida para llevar al trabajo sin calentar, tienes más opciones que las ensaladas o gastarte el dinero en sushi.
Piensa en el menú semanal con los tuppers que te vas a llevar. Si lo planificas bien, con un día o dos que cocines con antelación, tendrás la semana arreglada. Ahorrarás tiempo y dinero, y no tienes porqué repetir.
Hay alimentos que sirven de base perfecta para preparar distintos platos. Uno de ellos es la pasta, con la que puedes hacer ensaladas de distintos tipos. En el caso de que sí puedas calentar la comida y quieras hacerlo con tu pasta, no la cuezas demasiado y échale un poco de agua antes de recalentarla en el micro.
El arroz es más delicado, si no se come al momento, tanto frío como caliente puede quedar algo pastoso. Te recomendamos el cuscús o el bulgur, que se mantienen mejor.
Los hervidos son otra gran solución para llevar al trabajo, incluso fríos. A la verdura del cocido le puedes añadir alioli, y unas judías o guisantes con patatas y zanahorias con algo de mayonesa improvisan una ensaladilla estupenda. Además, con la patata fría se pueden hacer muchas ensaladas o variaciones de ensaladilla. En Choví cuentas con una amplia gama de salsas en sobres individuales, así que te resultará muy fácil llevártelas al trabajo.
No necesitas seguir una dieta vegetariana en las comidas para llevas al trabajo. La pechuga de pollo o pavo a la plancha cortada en tiras es otro gran acompañante para las ensaladas. Y las tortillas, con sus infinitas variantes, o los huevos cocidos también dan mucho juego.
Mundo sándwich
Por supuesto, siempre puedes recurrir al bocadillo o sándwich. Intenta usar pan integral y/o con semillas para que tus comidas sean más saludables.
Además, puedes probar otro tipo de emparedados; atrévete con el pan de pita o las tortillas de trigo, incluso mejor si son de maíz. Puedes preparar el relleno en casa y llevarlo al trabajo en un tuper, para luego montarlo fácilmente allí.
La gran solución
Si ni siquiera tienes tiempo de hacerte un bocadillo o simplemente no te apetece, no te preocupes y ponte en manos de los expertos.
En la gama de productos Choví Cheff encontrarás ya preparadas muchas de las ideas que te hemos propuesto: ensaladas y ensaladillas de distintos tipos, hummus, rellenos para sándwiches… Tienes variedad, calidad y sabor en tus comidas para llevar al trabajo, y más rápido imposible.