Calas Costa Brava: 214 kilómetros de franja litoral a través de las comarcas catalanas del Alto Ampurdán, el Bajo Ampurdán y La Selva, en la provincia de Gerona. La Costa Brava se extiende desde Blanes, conocido como el “Portal de la Costa Brava”, hasta Portbou, en la frontera con Francia.
Fue el periodista Ferran Agulló, en septiembre de 1908, quien definió en las páginas de La Veu de Catalunya este espacio litoral como “Costa Brava” para describir el carácter rural y salvaje de esta zona de la costa catalana. Un carácter que se manifiesta en una superficie en la que más del 30% está protegida como bien de interés cultural: el Parque Natural de Cabo de Creus, Parque Natural de las Marismas del Ampurdán, Islas Medas, Ses Negres y jardines botánicos son algunos de los espacios naturales más importantes junto a las fantásticas calas y playas que pueden disfrutarse a lo largo de la Costa Brava. ¡Te proponemos cinco calas para disfrutar de este fantástico litoral!
1. Sa Tuna (Begur)
En Begur pueden encontrarse algunas de las calas más conocidas de la Costa Brava. Rincones con el encanto especial que define este litoral: pequeñas calas de agua cristalina color turquesa para relajarse y disfrutar de la tranquilidad. Sa Tuna se encuentra a poco más de tres kilómetros de la ciudad y presenta un perfil rocoso, aguas cristalinas y un entorno natural arbolado.
2. Illa Roja (Begur)
Una enorme roca de color rojizo se impone en un espacio de aguas cristalinas. La Illa Roja, también en Begur, toma su nombre de esta formación natural tan característica que define la personalidad de un espacio que conquista a primera vista. Un espacio íntimo para que los amantes del nudismo disfruten de forma relajada en un espacio idílico protegido por piedra escarpada.
By Seruba
3. Rostella (Roses)
110 metros de longitud para un espacio de aguas cristalinas caracterizado por su baja ocupación. Situada dentro del espacio protegido del Cabo de Creus, es posible acceder a esta fantástica cala a través de un camino de tierra de 200 metros. Una cala tranquila y apartada que, al mismo tiempo, está cerca de Roses y de otras playas y espacios naturales del entorno.
4. Cala d’Aigua-Xelida (Palafrugell)
Aunque pertenece al municipio de Palafrugell, se sitúa a un kilómetro de Tamariu. Una pequeña cala de 25 metros de longitud, y aproximadamente 12 metros de anchura, rodeada por la punta des Bacn y la punta de Esguard. Un entorno que, además, completa su carácter con un espacio arbolado de pinos y aguas azules transparentes que invitan a la práctica del snorkel o, incluso, submarinismo, debido a la riqueza de su ecosistema marino.
5. Cala del Senyor Ramon (Santa Cristina d’Aro)
Un espacio para disfrutar de la naturaleza y de la imponente presencia de acantilados de hasta 800 metros. Aguas cristalinas, costa escarpada y ambiente tranquilo. Una cala que, además, goza de una larga tradición nudista y en la que, además, podrán disfrutarse servicios como duchas, baños y papeleras, además de un chiringuito.
