Con el puente de diciembre a la vuelta de la esquina ¿a quién no le apetece una buena escapada rural? El otoño es una de nuestras estaciones preferidas por sus maravillosos paisajes y apetecibles manjares. Es la estación perfecta para alejarte del bullicio de la ciudad y disfrutar de la naturaleza y el entorno rural.

Nuestro país ofrece un sin fin de posibilidades en cuanto a clima, paisaje, cultura y gastronomía. Planes románticos para disfrutar en pareja o planes ideales para la familia. Aquí te proponemos 5 destinos para una escapada rural que disfrutarás a lo grande.

1. Sierra de Gredos (Ávila)

En la provincia de Ávila está el espectacular Parque Natural de Gredos en el que sus paisajes no te dejarán indiferente. En esta sierra hay multitud de rutas de senderismo, de corta y larga distancia, aptas para todos los públicos, del montañero más aventurero a la familia que quiere dar un agradable y tranquilo paseo. Uno de sus lugares más mágicos es el Circo de Gredos, un circo glaciar situado en Navalperal de Tormes, que puedes descubrir a través de una preciosa ruta.

Además, seguro que has oído hablar del chuletón de estas tierras… Si eres un amante incondicional de la buena carne, no te puedes ir de Ávila sin probarlo ¡Buen provecho!

2. Albarracín-Teruel

Si aún no te has perdido por las calles de Albarracín, esta escapada rural te enamorará. Esta localidad es monumento nacional desde los años 60, y es una maravilla debido a la uniformidad de sus casas de colores rojizos, muy bien conservadas. Además, su sierra ofrece gran variedad de actividades para practicar en la naturaleza: montar a caballo, paseos en bici, jornadas micológicas…

También es muy recomendable degustar la deliciosa trufa de la zona. Justo durante el puente de diciembre es la feria de la trufa en Sarrión, población a 70 Km de Albarracín, donde se pueden probar y comprar trufas negras y otros manjares trufados. ¡Deliciosa experiencia!

3. La Garrotxa (Girona)

Es uno de los paisajes más sorprendentes de Cataluña, el cual ofrece dos atractivos principales: sus parajes naturales volcánicos y sus pueblos de cuento. Las tierras rojizas y negras del Parque Volcánico te sorprenderán.  Sus volcanes más famosos son Croscat y Santa Margarida. ¡No te quedes sin visitarlos!

La combinación de naturaleza y una maravillosa ruta de pueblos medievales te encantarán.  Besalú, Olot y Castellfollit son pueblos dignos de visitar, cada uno con un encanto especial.

Lo ideal para esta escapada rural es moverte en coche a tu aire para grandes distancias y coger fuerzas para caminar entre volcanes.

4. Setenil de las Bodegas (Cádiz)

Este curioso pueblo adosado a las rocas es un destino para una escapada rural la mar de interesante. Forma parte de la Ruta de los Pueblos Blancos de Cádiz, donde se unen patrimonio natural y cultural.

Lo más curioso de Setenil es que sus casas se amoldaron al terreno, situándose sobre y bajo las rocas, dando como resultado un espectacular mosaico de cuevas, calles arriba y abajo, y rincones con encanto por doquier. Además, en lo alto del pueblo hay un Castillo o Fortaleza Nazarí.

Lo más destacable de su gastronomía es su exquisito aceite de oliva. ¡Disfrútalo!

5. Selva de Irati (Navarra)

¿Te gustaría perderte en un bosque encantado? La Selva de Irati es tu oportunidad. Es un tesoro de la naturaleza, repleto de colores que cobran vida en función de la estación. En otoño disfrutar de un paseo entre los ocres de hayedos y abetos, el rumor de sus frescas aguas, las hojas caídas y la paz, te llevarán a experimentar un sin fin de sensaciones.

Senderos por los que perderte

Existe una red de senderos señalizada de diferentes extensiones y grados de dificultad, que te ayudarán a descubrir los mejores rincones de la Selva de Irati.

Uno de los senderos más conocidos por su popularidad es el sendero embalse de Irabia y Paraísos. El bosque de Irati es el marco de este sendero, que rodeando el embalse de Irabia, discurre en su práctica totalidad al abrigo del hayedo-abetal, alternando tramos de pistas forestales y antiguas sendas de leñadores.

¡Cálzate unas buenas botas, elige tu camino y echa a andar!

6. Consuegra (Toledo)

Castilla la Mancha siempre es una buena elección para hacer una escapada rural. Uno de los puntos que hemos elegido para esta escapada es Consuegra, que se encuentra en la línea del horizonte en La Mancha toledana.

Uno de los puntos más característicos de esta zona tan rural son sus gigantes molinos de viento, que te transportan directamente al rincón de La Mancha de Don Quijote.

Este grupo de molinos es una de los más amplios grupos de La Mancha y de los mejores conservados. Piérdete entre los molinos y la gastronomía más característica La Mancha propia de Don Quijote.

Don Quijote: una gastronomía muy peculiar

Podemos afirmar que El Quijote es una de las obras que más datos nos proporcionan sobre la cocina en la España del Renacimiento.

Esta cocina popular manchega, sus productos, sus recetas y sus preparaciones han cambiado poco a lo largo de los siglos y, en muchos casos, vemos cómo en diversos pueblos de La Mancha se han mantenido hasta la actualidad costumbres gastronómicas que ya se encuentran citadas en El Quijote. Algunos de los manjares más conocidos y más curiosos de El Quijote eran:

• Berenjenas en cazuela moxí
• Empanada de conejo albar (blanco)
• Empedrado, o duelos y quebrantos, se trata de una tortilla de huevos y sesos, aunque los expertos de Don Quijote aseguran que no tiene nada que ver una tortilla.
• Gachas: comida compuesta de harina y miel, suelta con agua, y cocida al fuego.

7. Ochagavia (Navarra)

En la zona del Pirineo, a 85 km de Pamplona se encuentra un pueblo con mucho encanto llamado Ochagavía.

Pasea y encántate sus calles empedradas y las casas pirenaicas más tradicionales. Te sorprenderás con sus casas rurales dieciochescas con preciosas portadas y escudos. ¿No te gustaría perderte unos días en este pueblo? ¡Haz las maletas y escápate de la rutina!

Cada uno de estos siete destinos para una escapada rural tiene su encanto, parajes naturales increíbles y pueblecitos de ensueño… ¿Con cuál te quedas tú?

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