¿Has probado alguna vez el gazpachuelo? Descubre en qué consiste este plato típico de Málaga y aprende a elaborar su receta muy fácilmente.
Historia, tradición y sabor. Sin duda, es una receta para hacer las delicias de grandes y pequeños, sin olvidar que el truco está en poner el toque personal para acompañar al gazpachuelo malagueño, un plato que no quiere ser el hermano pequeño del que se le parece en el nombre.
Instrucciones
- Se prepara el caldo con antelación, y se le incorporan las cabezas de gambas, y los huesos y cabeza de rape. Estos dos ingredientes sirven para darle sustancia.
- Se pone todo a calentar hasta formar el fumé, un fondo blanco hecho a base de pescados y mariscos. Para que esté exquisito es importante utilizar las espinas o restos de pescado con alto contenido en gelatina.
- Mientras se mezcla todo, se va aclarando con más caldo moviendo con una varilla.
- Se incorpora la mayonesa al caldo diluyéndola poco a poco, a fuego muy suave y se va moviendo (fundamental) mientras se calienta.
- Cuando el gazpachuelo alcance temperatura, es el momento de añadir los tropezones para que se atemperen en la sopa. Con ese calor se cocinarán las gambas.
- La sopa empezará a estar suficientemente caliente cuando el huevo de la mayonesa empiece a espesar el gazpachuelo y a darle la textura de crema ligera. Por eso no es necesario utilizar mucha mayonesa para que espese y se convierta en gazpachuelo. La clave está en remover sin cesar controlando la temperatura para que no se corte.
- El toque final es el limón. Es mejor añadirlo cuando la sopa esté a punto de finalizar para darle el punto de acidez deseado.
- La crema caliente ya está hecha. Ahora solo falta que lo acompañe el arroz y las patatas, y para los muy paneros, una rebanadita de pan frito o tostado. El gazpachuelo está listo para servir y degustar.
