La patata es un alimento comodín entre los más apreciados en la cocina. Seguramente uno de tus platos favoritos, o que recuerdes de tu niñez por ser un festín cuando lo hacía tu abuela, lleva como ingrediente la patata, ya que es un tubérculo muy presente en muchísimos de los platos de la gastronomía española.

Las propiedades de la patata

Este hecho no es de extrañar, ya que la patata tiene un sinnúmero de propiedades. Es rica en hidratos de carbono complejos (almidón), y vitaminas A, C, y del grupo B. Además, contiene minerales como el potasio, el fósforo y el calcio.

Existen 200 variedades de patatas, cada una de ellas más adecuada para un tipo u otro de cocción. Para mantener el mayor contenido de nutrientes es preferible no cocer las patatas en agua, sino cocinarlas en el horno, en papillote o al vapor y pelarlas siempre, después de la cocción.

No obviaremos el mito de que clasifica a la patata como un alimento que “engorda”, porque como bien sabéis, no existen alimentos buenos o malos. En realidad la patata tiene tan solo 75 calorías por cada 100g, por lo cual si quieres seguir una alimentación equilibrada, puedes incluir perfectamente la patata en tus primeros platos diarios junto con verduras, ensaladas, purés, o bien, como guarnición de los segundos. Eso sí, lo ideal es utilizar cocciones que no incrementen las calorías, como por ejemplo, las que hemos comentado anteriormente.

Una curiosidad que nos parece muy interesante comentar es que los brotes de las patatas contienen solanina, un componente que, si se ingiere en cantidades excesivas, puede resultar perjudicial para nuestra salud. ¡Pero esto tiene fácil solución! En el momento de pelar las patatas, corta un buen trozo, tanto alrededor como en profundidad, en la zona del brote y, voilà, eliminarás la solananina.

Recetas: un plato a base de patata

Los platos a base de patatas son muchísimos: tortilla de patata, patatas a la riojana, huevo frito con patatas, patatas bravas, asadas o al horno, marmitako, bacalao con patatas y alioli, patatas rellenas, estofado de sepia, patatas con alioli, pastel de patata y carne picada… Podríamos seguir, debido al sinfín de platos típicos que llevan como ingrediente principal, o acompañamiento, este tubérculo.

Pero ¿se te ocurre algún plato único e ideal para estos últimos días de calor que contenga patata? Aquí va una sugerencia: ensalada de patata con tomate, cebolla, zanahoria, pimiento rojo y verde, aceitunas, huevo duro, diente de ajo, perejil, aceite de oliva, vinagre o zumo de limón, sal y pimienta.

¿Qué te parece? Con estos ingredientes conseguimos un plato completo, equilibrado y cargado de vitaminas y minerales antioxidantes y… ¡qué rico es!

Además, es un plato ideal para preparar y aliñar el día de antes porque la patata se impregnará aún más del sabor del aliño y estará mucho más sabrosa. Así que, ya tienes el plato perfecto para incorporarlo en tu dieta, incluso si comes de tupper.